Si estás familiarizado a trabajar (aunque sea poco) con el servidor de tu web, si has tenido que «trastearlo» o simplemente has tenido que comparar características entre la oferta existente en el mercado el tema de te será de bastante utilidad.
En ocasiones las empresas proveedoras de servicios de alojamiento web (hosting) llevan a cabo un servicio excelente, en otras, nos encontramos con situaciones que dañan la reputación online de nuestra web. El problema del que hablaremos hoy no es visibles a simple vista, y tampoco al adentrarnos en el servidor o en el código de programación de nuestra web.
¿Qué es una Blacklist o Lista Negra?
Las listas Negras o Blacklists se crearon con el objetivo de poner freno o los correos electrónicos publicitarios no deseados, también conocidos como spam. Las Blacklist son, como su nombre indica, una lista de direcciones IP o direcciones web (dominios) que han sido denunciados con anterioridad por enviar mensajes de correo electrónico considerados como spam, es decir, publicidad no deseada a usuarios que no la habían solicitado previamente.
¿Qué utilidad tiene una Blacklist?
Las listas negras suelen ser utilizadas por empresas proveedoras de servicios de email para filtrar correos potencialmente dañinos o spam que sean enviados a sus clientes (usuarios o empresas que están utilizando el servicio de correo de dicha empresa). Los correos enviados desde remitentes cuyo dominio o ip está en una blacklist son bloqueados y no se entregan al remitente. Principalmente se trata de un filtro de seguridad para evitar posibles infecciones y a la vez, mejorar el servicio recibido por sus clientes.
¿Por qué han incluido mi IP o dominio en una Blacklist?
Los motivos principales por lo que se incluye una ip o dominio en una blacklist son diversas: se envía una gran cantidad de correos a destinatarios que, en su mayoría, marcan esos correos como publicidad no deseada o spam. Otro motivo puede ser que detecten que el remitente esté enviando mensajes maliciosos para infectar al receptor.
A la práctica, se trata más de un proceso lógico y de uso ético y correcto del servicio de email. SI utilizamos una cuenta para spammear a terceros con publicidad no deseada, o tratamos de infectarlos, parece lógico que la comunidad nos marque para evitar que sigamos causando ese tipo de molestias a terceros.
Un dato importante a destacar: en servidores compartidos, en los que diferentes webs utilizan la misma IP, el comportamiento de uno de nuestros «vecinos» puede hacer que nuestra IP aparezca en una lista negra, penalizando o restando actividad a nuestra estrategia de email marketing.
¿Qué sucede si la IP de nuestra web está en una Blacklist?
Si nuestro servidor es compartido,estaremos compartiendo la IP con «nuestros vecinos» del hosting. Esto puede provocar algunos problemas en nuestra estrategia SEO o de email Marketing si la empresa proveedora de hosting no vigila de cerca las IP’s con las que usa y no se percata de la inclusión de las mismas en listas negras o Blacklists. Existen diferentes soluciones que deben ser estudiadas en función del caso y de las necesidades de la empresa o individuo en cuestión.
Como vemos el problema de las blacklist, es algo más importante de lo que parece a simple vista. Debemos ser cuidadosos con el uso que hacemos de nuestras cuentas de correo o web, a la vez que muy minuciosos con el hosting que escogemos (el precio no lo es todo).
Y si a pesar de todo esto, seguimos teniendo dudas, contactar con una agencia especializada en email marketing o marketing online.